miércoles, 15 de agosto de 2012

EL TIO FALO: ROCANROL RIVADAVIENSE EN CARPA CULTURAL



En vivo en la Carpa de la cultura de el festival Rivadavia le Canta al Pais.

DIFUSION ANTISISTEMA: METAL ROQUERO DEL ESTE MENDUCO



En Vivo El Faro 21 de Agosto 2010, Rivadavia, Mendoza, Argentina

martes, 14 de agosto de 2012

AVECRISTO: HISTORIA ROQUERA RIVADAVIENSE

TRAMOS DE LA CRONICA DEL ROCANROL VIÑATERO DEL ESTE MENDUCO ESCRITA
Por FABRICIO MARQUEZ

(Agradecimiento especial a FEDERICO MAÑAS, quien nos regaló este bello recuerdo musical inolvidable. Está en su canal de Youtube, subido el 27/02/2012)


Ave Cristo: Carlos Calderón, voz y primera guitarra; Mariano Arboit y Guillermo Acieff, guitarras rítmicas; Osvaldo "Ciego" Gimenez, bajo; Juan Salomón, batería; César Plastina, armónica y flauta; la Turca Hebe, coros. Carlos armó, organizó, enseñó, aportó un puñado de canciones y después se fue, a Río Negro, porque había encontrado trabajo por allá y en aquel momento eso era lo preponderante.


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El 9 de julio de 1981, en el Cine Ducal. Según el Diario Los Andes de esa época, ante ochocientas personas y con notorio éxito. Tenían 17 o 18 años, algunos recién terminaban la secundaria, otros no. Junto con ellos tocaron dos bandas mas, con gente de San Martín y Palmira: el Dúo Vida, integrado por Chucho Campanella y Sergio Gimenez, o sea Gallineto. Y Nosotros, que cerraba el show, y que estaba formado por los hermanos Sotelo, Mario Campanella, Cordero Rogel y un muchacho recién llegado a Palmira desde San Luis, siguiendo a su familia porque al padre, ferroviario, lo habían trasladado: César Muñoz, el Negro César. Se podría decir que esa fue una noche fundacional, porque pasaron cosas importantes: en primer lugar, Ave Cristo tuvo un debut exitoso, en el que se puso de manifiesto todo el tiempo, el esfuerzo y las ganas que habían puesto para lograrlo. El premio fue tocar en un gran escenario y tener una sala llena aplaudiéndolos. Sin lugar a dudas algo estaba cambiando en el ánimo de la gente, porque la banda generó una expectativa y una asistencia masiva que Carlos Calderón jamás se hubiera imaginado y que a cualquier banda en la actualidad le resulta casi imposible de lograr.